
Hace unos días, el 9 de noviembre, iniciaron las acciones de renovación de la Quinta Avenida en Playa del Carmen con restauración vegetativa, al trasplantar palmas en sustitución de los árboles que murieron a pocos días de la obra realizada por la pasada administración municipal.
Las autoridades actuales retiraron solo ejemplares muertos tras ser persuadidos, ya que querían solo palmas, y a fin de “ser más amigables” con el medio ambiente colocaron palmas de la región, aunque se volvió a ignorar el diagnóstico realizado por expertos, el cual seguro seguirá archivado.
Días después, Lili Campos Miranda, presidenta municipal, anunció la “colocación” de la primera piedra del Parque Xaman-Ha en Ciudad Mayakobá, obra que fue gestionado en la pasada administración 2018-2021. Aunque queda claro que existe un recurso pendiente por ejercer y que será aportado por la iniciativa privada.
Al filo de dos meses del actual Ayuntamiento municipal nos hemos dado cuenta de que la política en Solidaridad no cambió, sigue siendo lo mismo: pan y circo. ¿Por qué? Se sigue simulando que se gobierna con y para los playenses, cuando no se toma en cuenta a los ciudadanos que conocen más que ellos en la materia ambiental –y seguro pasa lo mismo en otros rubros-.
¿Cómo se puede tener calidad en una obra por día cuando se evade la socialización de las acciones, el dialogo y los acuerdos? La obligación del primer representante del municipio es sumar a la comunidad empoderada y conocedora sobre los temas a trabajar, no se habla de una organización sino a la suma de los expertos.
Más de lo mismo: el equipo de trabajo de la Décima Segunda Regiduría a cargo de Gabriel Mendicuti Loria, metió al horno un proyecto denominado “Tu basura si vale”, y se quemó antes de salir. Quien tenga memoria recordará este programa llevado a cabo por otras administraciones, la pregunta aquí sería ¿Cuál fue el resultado? ¿Ha cambiado algo la práctica de manejo de residuos en la entidad por parte de la ciudadanía? Pues no.
Se lamenta decir que proyectos como este no tendrán éxito porque se ignora, como ya se ha platicado, la socialización durante la planeación, diseño y ejecución de las acciones. Tan sencillo que es observar, preguntar e incorporar lo que ha tenido éxito, tomando en cuenta por ejemplo, el programa municipal Reciclatón con más de una década de vigencia, así también a los acopiadores de residuos, que durante la crisis sanitaria ocasionada por el SARS-CoV2 emprendieron la iniciativa “Mi ruta de reciclaje” al cual se sumaron más de 54 zonas habitacionales en Playa del Carmen.
Es una verdadera grosería lo que está pasando en nuestro municipio en materia de medio ambiente, un puñetazo en la cara de los ciudadanos, ya que es la suma de pequeñas acciones lo que contribuyen a crear un cambio o seguir con lo mismo; pero también sucede a gran escalas, tan es así que más de 500 organizaciones de la sociedad civil (OSC) nombraron a nuestro país el “Fósil” del Día en el marco de la COP26, ante su falta de intensión para combatir el calentamiento global en la cumbre climática.
Playa del Carmen ya no será lo de antes, esa villa de pescadores que tenemos en la imaginación no volverá, sin embargo, trabajemos juntos creando una sociedad que sustente y celebre la vida. Felicidades a nuestro hogar en sus 119 aniversario de vida como comunidad.