Sin lugar a dudas, la dirigencia de Morena en Quintana Roo, encabezada por Johana Acosta Conrado, debería tener más confianza en la obra que han construido. No es perfecta, ni mucho menos, y habría bastante que fortalecer y mejorar para lo que viene en el 2024, en torno a las elecciones. De ahí, que, carece de sentido deteriorar ese enorme activo comportándose como tantas veces lo hicieron los que corrompieron la vida pública. Dicho de otra manera, responder con las mismas artimañas.
“PERO QUE NECESIDAD”
Es evidente que rumbo al proceso electoral del 2024, en ambos bandos, no ha quedado claro que, la disputa por el poder no puede ni debe convertirse en un intercambio de calificativos, cada vez más burdos y soeces para descalificar al contrario. Por desgracia, en la arena política, lo que se vive, es una permuta de venenos sin el menor intento de argumentar razones, más allá de la burla que humilla o disminuye. Dicho de otra manera, la conversación pública ha sido substituida por redes sociales destinadas a golpear y distorsionar para dañar al rival. Por lo cual, NO hay razón ni necesidad para caer en el lodazal, disfrazado de “posturas partidistas”.
Ninguna de las dos partes se salva. El obradorismo a través de Johana Acosta Conrado, dirigente estatal de MORENA ha intentado justificar este intercambio de agresiones como la respuesta que había que dar al ataque masivo y sistemático del que consideran son víctimas. Por lo cual, un movimiento que ha planteado al país la necesidad de mirar por lo pobres y combatir la enorme desigualdad, tendría que actuar de otra manera. Por su parte, en el PAN su líder en el estado-Reyna Tamayo, sigue sin definir una postura en torno al proyecto de reelección de Lili Campos, sus declaraciones son tan prudentes que rayan en la tibieza.
¿EN SOLIDARIDAD, QUIEN PAGA?
De ahí que, hoy, la escena política en Solidaridad, ha derivado en un circo. La información se ha convertido en entretenimiento y espectáculo. Pero también es cierto que el exceso comienza a provocar un hartazgo. En la actualidad se ha descubierto que existe una red de 10 páginas o más con gasto de publicidad en Facebook millonarios, cuyo objetivo es realizar “guerra sucia”, con desinformación y sin sustento contra el proyecto de reelección de la actual alcaldesa de este municipio-Lili Campos. De acuerdo con Facebook, en materia de difusión, destacan varias, entre ellas, La Otra Cara Caribe (gasta 24 mil 700 pesos); La Verdad Maya (12 mil pesos); Maya Sin Frontera (300 pesos por nota), NetaCaribe (8 mil 600). Por lo cual, cabe preguntar ¿Quién paga, dicha propaganda?
Por último, muy independiente de los aciertos y errores cometidos por la joven dirigente de MORENA en Quintana Roo, el obradorismo posee un capital ético político que no debería diluirse en torneos de mezquindades, destinados a premiar a quien sea ingenioso para el insulto, al que tenga el micrófono más grande o los mejores motores en redes sociales. De ahí, que, la propuesta básica de la izquierda, es la justicia social, de gobernabilidad y sentido común, más allá de la polvareda o los sombrerazos, a esa habría que remitirse.
DE PASADITA…
Que son más de 50 las páginas apócrifas en redes sociales, descubiertas por el gobierno de Lili Campos, listas para continuar con “la chamba sucia” de realizar chismes de los mismos chismes. También ya tienen conocimiento del presupuesto de pago de publicidad, el cual es de varios millones de pesos al mes.
NOS LEEMOS EN LA PRÓXIMA…
